Es difícil establecer los límites entre las relaciones personales y las profesionales Si su familia es propietaria de una pequeña empresa, es probable que alguien ya le haya preguntado acerca de sus intenciones de trabajar allí. Los adultos jóvenes, en particular los hombres, tienen cierto sentido de obligación no sólo de incorporarse al negocio de sus padres sino también de mantener un alto grado de lealtad. Si bien seguir la tradición de la empresa familiar constituye sobradas ventajas, también puede suponer algunos retos tales como las implicaciones sicológicas y emocionales. Trabajar e interactuar diariamente con quienes ha convivido toda la vida puede entrañar cierto grado de tensión y estrés. Un negocio perteneciente a una familia tiene una estructura más relajada que una compañía tradicional. Por ende, puede que reciba órdenes de varios jefes al mismo tiempo y, a veces, tenga que bregar con instrucciones completamente distintas.
Ética empresarial
Al trabajar en cualquier empresa con cuyos dueños no tiene parentesco alguno se debe acatar ciertos reglamentos. En cambio, ese protocolo puede dejar de existir cuando labora para miembros de su familia. A veces se levantan las voces y no hay límites para los señalamientos. Las leyes laborales protegen a cualquier otro trabajador contra todo tipo de maltrato verbal por parte de sus empleadores. No es que usted no esté protegido legalmente. Lo está, pero esa línea delgada puede cruzarse más a menudo cuando el empleado forma parte de la familia consanguínea del empresario.
¿Ambiente laboral o familiar?
Aunque el ambiente de trabajo es más cálido en las empresas familiares, el mismo grado de familiaridad puede originar serias discusiones en la oficina muchas veces acerca del trabajo y muchas más sobre situaciones íntimas de la familia. Durante estos incidentes, se entorpece la comunicación puesto que se suelen mezclar las emociones en los asuntos laborales.
En el negocio como en la casa
Sea quien sea en el linaje familiar, siempre ha habido un trato entre usted y el resto de la familia. Indistintamente de la edad que tenga, esa relación puede trasladarse al lugar de trabajo si se incorpora a la plantilla de la empresa de sus padres. Nunca se comienza con una ³hoja de vida² nueva como sucedería con cualquier otra compañía. Ya trae la huella del tipo de relación que haya tenido con sus parientes en el seno del hogar y, dependiendo de si es buena o mala, puede que lo traten en consecuencia.
Desempeño profesional
Es raro que evalúen su rendimiento laboral. Probablemente nunca le digan cuán bien está cumpliendo con sus funciones dentro de la empresa de la familia. Por alguna razón, se espera mucho más de alguien que trabaja con sus parientes que de otro empleado. Aun cuando se queme las pestañas trabajando hasta tarde o sea el primero en llegar a la oficina en las mañanas, puede que ni se lo reconozcan. Es simplemente el esfuerzo que esperan de usted.
Para tener en cuenta
- Cualquier logro que alcance mientras trabaja en el negocio de sus padres si ese el caso puede que nunca sea visto como propio a los ojos de los demás. Pueden pensar que el aumento de sueldo que le aprobaron o la palmadita que le dieron en la espalda es sólo producto del parentesco que guarda con los dueños de la empresa.
- Si en un futuro decide independizarse y trabajar en otra compañía, estos logros pudieran no ser de mucho valor si los nuevos empleadores se enteran de que los consiguió cuando trabajó para sus familiares.
- Prepárese para escuchar críticas destructivas acerca de sus parientes. Habrá algún empleado que no esté a gusto o se preste a hacer comentarios negativos aun en las instalaciones de la empresa. Usted puede decir cualquier cosa de su familia y no hay problema. Pero si un extraño lo hace, es diferente.
- Al estar con otros empleados necesitará adoptar los ideales y valores de la empresa como si fueran los suyos. Independientemente de si está de acuerdo con ellos o no, no puede mostrarse en contra de la cultura corporativa de su familia.
Servio Viloria
Especial para El Universal
