La séptima encuesta nacional de salarios que realizó Conestructura, y que presentó ayer la Asociación Venezolana de Gestión Humana, revela que las empresas prevén un aumento salarial promedio de 29,8% en 2012, ligeramente superior a lo calculado para este año, que fue 26,92%.
El incremento estimado está segmentado en dos partes. Una primera de 18% en el primer semestre del año y otra de 10% en el segundo semestre.
Los elementos típicos de compensación son 120 días de utilidades, 58 días de bono vacacional, 350 bolívares de bono post-vacacional, 51,42% de recargo del bono nocturno, 85% de recargo de las horas extras diurnas y 115% de recargo de las horas extras nocturnas.
Raúl Briceño, consultor de recursos humanos y director de Conestructura, destaca que este incremento tiene un comportamiento diferenciado en función de los distintos sectores. "Por ejemplo, la ausencia de talento tiene efectos distintos en tecnología que en consumo masivo, y eso hace que su estrategia de retención (de personal) sea más agresiva", precisa.
En términos de inflación, este aumento salarial supera levemente las proyecciones empresariales. Los resultados del estudio refieren una tasa inflacionaria de 29,39% el próximo año, en contraste al Banco Central de Venezuela, que calcula entre 23 y 25%.
La encuesta tomó como referencia la estructura de nómina presupuestada en 120 empresas nacionales, que participaron en la investigación.
Los sectores salud y tecnología apuntan a ser más competitivos, mientras que la industria de consumo masivo ha mantenido su estructura. No obstante, Briceño cree que ningún sector se contraerá en 2012, solo que algunos no avanzan con la misma agresividad por el entorno y los negocios.
Otra de las características que evidenció la encuesta es que el mercado venezolano ha ido aprendiendo a revisar su estructura presupuestaria con más frecuencia. Antes se hacía de manera anual, pero hoy en día se efectúa cada seis meses, incluso trimestralmente.
La variación de la estructura legal y los cambios de las condiciones socioeconómicas de las empresas son determinante en los cálculos.
Briceño destaca que no se puede dejar a un lado que las inquietudes de lo trabajadores son más consideradas que en el pasado, porque ha habido riesgos empresariales basados en descontentos laborales.
Comportamiento venezolano
El comportamiento salarial venezolano depende de la posibilidad de hacer negocios, marcada por recurrentes variaciones en el mercado, refiere.
Recuerda que el Producto Interno Bruto venezolano tenía una expectativa este año menor a la del resto de Latinoamérica. Las estimaciones eran de 0,5%, mientras que en Perú, Ecuador, Chile, Bolivia y Uruguay superaban el 2%. Sin embargo, se acumuló un crecimiento de 3,5%. Esto muestra que el mercado venezolano es menos estable con respecto al de los demás países de la región.
Los sectores de menos recursos son los que resultan más afectados, porque no reaccionan de forma autónoma en un entorno agresivo.
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