lunes, 20 de septiembre de 2010

Maximizar el espacio del clóset

Son las 6:30 de la mañana y es momento de apurarse para ir a trabajar. Parada frente a esa área tan caótica que usted llama clóset, con tan solo una toalla que la cubre, lo que le provoca es olvidarse del trabajo y volver a acostarse. Ya no sabe qué hacer.

Sin espacio

¿Cada vez que abre la puerta del armario las prendas de vestir prácticamente le caen encima? ¿Todo está colgado de manera desordenada? ¿Pierde mucho tiempo buscando una pieza en particular? Es muy fácil ir metiendo la ropa y los zapatos como vayan cayendo en el clóset, sobre todo si es de las personas que siempre está dejando las cosas para después. En menos de lo que se imagina, el guardarropa se convierte en un campo de batalla y no puede encontrar ese pantalón que tanto le gusta.


Ordenar el clóset puede ser una tarea abrumadora. Una de las formas más sencillas de simplificar la rutina de las mañanas es organizar cada uno de los compartimientos y, más importante aún, mantenerlos ordenados.

A sacar todo

No puede comenzar a organizar el armario sin antes vaciarlo completamente. Es preciso saber qué tiene y en qué estado se encuentra cada prenda. Asegúrese de contar con suficiente espacio para movilizarse con facilidad. Separe las prendas y vaya colocándolas en pilas sobre la cama o en cestas: camisas, franelas, pantalones, faldas, suéteres, chaquetas, carteras, cinturones, ropa interior, zapatos. Revise cada pila y decida qué va a volver a guardar. Aparte todo lo que no ha usado en meses o que no le sirve y colóquelo en una cesta de cosas que puede regalar o donar a una institución benéfica. Lo más probable que es que no las vuelva a usar. Si tiene ropa que no se ha puesto en mucho tiempo pero que guardan cierto valor sentimental o que no le quedan pero que espera usar cuando rebaje unos kilos, guárdelos en otro lugar que no sea su habitación.

Al volver a meterlos en el armario está desperdiciando un espacio precioso que seguramente le hace falta para guardar otras cosas. Si en seis meses ni siquiera se acuerda de que existen, deshágase de todo.

Cada cosa en su lugar

Ya que solo le queda la ropa que usa siempre, sepárela por categoría. Si quiere ponerse esa blusa azul para trabajar no tiene por que buscarla entre los pantalones. Una manera excelente de ordenarla es agruparla según el estilo. Cuelgue la ropa casual que usa para ir a trabajar en la parte derecha del armario y la que se pone a diario en la izquierda. Si el clóset tiene otro compartimiento para colgar más prendas, úselo para la ropa de fiesta. Dentro de esta categoría, siga ordenando según el tipo -vestidos, pantalones, faldas, camisas manga larga, camisas manga corta, jeans- y el color. Hay quienes prefieren organizar la ropa por combinación.

Para ordenar mejor

Utilice ganchos de plástico de buena calidad o de madera y deshágase de los de metal que tanto daño le hacen a la ropa. Hay ganchos múltiples para pantalones que permiten ahorrar mucho espacio. En ellos se pueden guindar hasta cinco piezas. Los suéteres ocupan mucho espacio, y si los cuelga comienzan a estirarse y pierden la forma. Para conservarlos en buen estado, dóblelos y colóquelos ordenadamente en una repisa. Las franelas, la ropa interior, las medias para jeans y los trajes de baño pueden guardarse en las gavetas ya que ocupan menos espacio que otros. Organizar el guardarropa de esta manera le tomará cierto tiempo al principio, pero una vez que se acostumbre a mantenerlo ordenado verá que no tardará en arreglarse en las mañanas para ir a trabajar.

Zapatos, zapatos y más zapatos

El piso del clóset es uno de los espacios más difíciles de mantener en orden.
Casi siempre nos quitamos los zapatos y los lanzamos dentro del armario sin importar como caigan. Cuanto más tenemos, más nos cuesta encontrar un par en particular.
Aunque algunas personas prefieren dejarlos en sus cajas originales y guardarlas en el clóset, lo más fácil es organizarlos en línea. Pero ésta es también la manera más fácil de que se desordenen. Si no dispone de espacio para colocar una zapatera dentro del clóset, cuelgue un organizador detrás de la puerta del armario. Para facilitar la búsqueda, es mejor usar uno de plástico transparente. Vaya ordenándolos de arriba abajo, comenzando por las sandalias y los zapatos más livianos como los deportivos hasta terminar con los más pesados. Las botas y los zapatos que no quepan en los bolsillos del organizador pueden colocarse en orden en el piso del armario.


No olvide guardar también las pantuflas para liberarse del ritual de estar buscándolas todas las noches debajo de la cama.

Servio Viloria
servioviloria@hotmail.com
Especial Para El Universal

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