La práctica de blindaje de vehículos no es algo que esté de moda, es la herramienta a la que muchos han recurrido para salvaguardar su vida y la de sus familiares.
En Venezuela existen empresas que se encargan de prestar este servicio, que brinda al usuario un poco de tranquilidad a la hora de transitar por las calles con sus unidades. Orlando de Armas, gerente de Comercialización de Blindcorp Venezuela, enfatiza que todas las partes de un vehículo se pueden blindar.
El proceso se lleva entre 45 y 60 días, y va a depender del nivel del blindado que desee el cliente. En ese tiempo la unidad se desarma casi completamente para incorporarle la capa de protección balística, y después se rearma. Se le adicionan los accesorios de seguridad y se cuida que sus acabados sean idénticos a los originales. El caparazón, postes, pilares de la unidad, la batería y el tanque de gasolina se recubren con material a prueba de balas, como el acero balístico o fibras sintéticas como Kevlar o Dyneema. Paralelamente, a los cristales se les instala una película a prueba de balas.
El sistema del rastreo del vehículo vía satélite y los cauchos también se blindan.
Más detalles
Aunque en Venezuela no es muy solicitado, existe la posibilidad de colocar al vehículo un sistema de gas irritante.También otros accesorios de seguridad como sirena, luces estroboscópicas y un sistema de intercomunicación con el exterior del vehículo. Al concluir con cada detalle, las partes modificadas del automóvil se pintan para devolverles su apariencia original. La empresa es muy cuidadosa con lo relativo al control de calidad, pues antes de entregar la unidad al cliente se realizan pruebas en los sistemas y el rendimiento de la unidad.
Protección
Existen varios parámetros en este importante rubro. El grado de protección depende de la resistencia al peso que pueda sostener el vehículo, así como a los distintos tipos de proyectiles. Un blindaje ligero puede pesar unos 100 k, mientras que uno de nivel II o III 290 k. Es importante destacar que en carros pequeños no es recomendable un revestimiento total, debido al peso de los materiales utilizados. Los niveles II y II protegen de ataques realizados con armas conocidas como cortas. El nivel III resiste prácticamente a todas las armas de mano, incluyendo las conocidas como largas; es decir, rifles, rifles de asalto y algunas escopetas. Este tipo de armas es empleado más comúnmente por el crimen organizado.
Delito y tipo de arma
La categoría I, protege del robo del automóvil en presencia de sus pasajeros, resiste ataques de todas las armas convencionales de los calibres .22, .38, .45, 9 mm y .357 Mágnum. La II resguarda a los pasajeros de asalto con armas convencionales más la Mágnum .44 y subametralladoras. La III, secuestro, ataques de rifles militares AK-47, entre otros.
Hay empresas especializadas que blindan los vehículos contra la inseguridad
Jesús Soriano
Especial para El Universal
Foto cortesía