Desde hace algunos años, ante la perspectiva de que en un futuro las fuentes de generación de energía verán limitada su capacidad y las altas dosis de contaminación pueden afectar a la mayor parte de las ciudades, se está intensificando el estudio y la construcción de edificaciones sostenibles. El estudio de arquitectura Goyeneche Arquitectos Asociados a lo largo de más de 30 años de trayectoria en América Latina y España se caracteriza por desarrollar proyectos de construcción novedosos. Las viviendas bioclimáticas se han convertido en su referente.
Para otorgar a una edificación el calificativo de sostenible o bioclimática debe de conjugar la relación entre la composición material de la edificación (cerramientos, aberturas, impermeabilizaciones, ventilaciones naturales), el lugar de ubicación (clima, orografía, temperatura, fenómenos meteorológicos, paisajismo) y el máximo rendimiento de las instalaciones que sean necesarias para un funcionamiento óptimo, basado en el confort y el bienestar para el que es proyectado.Para José Carlos Goyeneche, la arquitectura "es la capacidad de organizar los espacios y crear ambientes, utilizando recursos del entorno como la luz, las sombras, y los elementos propios de la naturaleza".Elementos que aporten sensaciones cambiantes "y que gratifiquen a las personas que residan en estos espacios". Según Goyeneche, una vivienda bioclimática no tiene que sacrificar otros valores arquitectónicos.Pero no debe ignorar proporcionar la mayor eficacia energética y de respeto al medio ambiente. "Una vivienda bioclimática debe ser bella y gratificante; y una vivienda bella puede y debe de ser bioclimática y por todo ello saludable". El arquitecto afirma que "al contrario de lo que mucha gente cree", un edificio ya sea residencial colectivo, de oficinas u otras características, en un entorno urbano puede ser un espacio apto para la sostenibilidad y el desarrollo respetuoso con el medioambiente.
Ejemplo de sostenibilidad
La vivienda que presentamos como ejemplo está construida sobre una colina en la urbanización de Ciudalcampo, en los alrededores de la capital de España, y fue creada por Goyeneche para su uso propio. La búsqueda de un entorno saludable y la obtención de espacios de energía positiva fueron el objetivo de su diseño. La casa está integrada en su ubicación con la orientación solar coincidiendo con los ejes norte-sur y este-oeste para aprovechar la luz de una manera meticulosa y práctica.Se trata de una vivienda ecológica no sólo por la selección de materiales naturales sino por una cuidada disposición de los espacios que permite una excelente percepción de los juegos de luces, conjugando la iluminación con la ventilación natural. Los ventanales están protegidos por estores motorizados de fibra de vidrio también protegido, que filtran 85% de la luz solar para evitar daños en el interior de la vivienda, en verano y dejan pasar toda la luz fría de invierno, manteniendo suficientemente la visión del exterior. El aislamiento térmico generado gracias a las ventanas y los materiales aislantes hace posible una vivienda más cómoda, ahorrando energía en calefacción y refrigeración.
Aprovechamiento de la iluminación
La luz natural es uno de los principales recursos que se pueden aprovechar en la vivienda utilizada como ejemplo. El recorrido del sol cada día va iluminando cada espacio de la vivienda a medida que transcurre el día. El paso de la luz se inicia en los dormitorios al amanecer y continúa recorriendo el porche de la vivienda (al que se vuelca el salón de doble espacio vertical) y la piscina exterior situada junto a la fachada de vidrio del comedor. Luego, una vez rodeado, buscar el ocaso iluminando la vivienda con reflejos en la lámina de agua de la piscina. El sol, al atardecer, ilumina la fachada oeste, protegida en verano por la tercera piel de fibra de vidrio, y da vida al porche que une el comedor con la cocina de la vivienda en planta baja, y el estudio de diseño, pintura y escultura en planta primera. Se han utilizado dispositivos verticales en los huecos de las orientaciones este y oeste para bloquear la entrada del sol en verano, y evitar que penetre en el interior de la vivienda y se caliente; para la protección en la orientación sur, se utilizan pérgolas y elementos horizontales, que tamizan en verano la agresión solar y permite en invierno la penetración del astro solar.
Inmaculada Tapia/Efe Reportajes