Los teléfonos celulares son un dispositivo de comunicación móvil que si se lleva en el automóvil resulta muy útil en caso de una emergencia. Sin embargo, hablar por ellos mientras se maneja un vehículo puede ser la causa de la emergencia.Diversos estudios han demostrado que una persona que va conduciendo un auto y conversando por celular al mismo tiempo no puede realizar ambas actividades efectivamente.
De hecho, la mayoría de los accidentes de tránsito son causados por algún tipo de distracción por parte del conductor, y el peligro que representan los teléfonos móviles al manejar es ampliamente conocido.
Durante la conversación, el conductor puede distraerse aunque sea por escasos segundos y perder la concentración en la vía, causando un accidente que a veces puede ser fatal.
¿SMS o SOS?
Sostener el volante con una mano y enviar mensajes de texto con la otra es incluso más peligroso que conversar únicamente por teléfono al conducir. Para mandar un SMS (siglas en inglés para mensaje de texto), la persona tiene que apartar los ojos de la carretera y enfocarlos en el celular, y la más mínima distracción puede poner su vida en peligro.
Los diferentes estudios realizados, sumados a las estadísticas de muertes en accidentes viales causados por el uso indebido del celular dentro del vehículo, han impulsado a muchos países a penalizar e incluso prohibir conversar por teléfono al manejar.
Si bien estas normativas se mantienen vigentes en las leyes de tránsito terrestre de tales países, en muchos otros como Venezuela cambia.
En el país se puede hablar por celular al conducir, siempre y cuando se haga mediante el dispositivo de manos libres.
Un estudio publicado en la revista New England Journal of Medicine ya advertía en 1997 que los conductores imprudentes que conversan por teléfono mientras manejan un auto tienen de cuatro a cinco veces más probabilidades de sufrir un accidente que quienes no lo hacen.
Alertaba, además, que los celulares que permiten tener las manos libres al hablar no brindan una ventaja de seguridad respecto a los equipos de mano.
Usar el teléfono celular al manejar no sólo distrae la atención visual; la conversación también distrae al cerebro, y el hecho de hablar por el dispositivo de "manos libres" no quiere decir que el conductor esté completamente seguro.
Explicación científica
Investigadores estadounidenses especializados en Ciencia Cognitiva averiguaron lo que sucede exactamente en el cerebro cuando una persona está conduciendo y hablando por celular al mismo tiempo. Para ello, utilizaron la resonancia magnética.
Hallaron que cuando se les asignaba diferentes tareas a los participantes, se iluminaban diferentes partes del cerebro. Cuando éstos se concentraban en escuchar algo, el área cerebral que controla la visión se hacía menos activa y viceversa.
Al estudiar el movimiento de los ojos de personas que hablaban por teléfono al conducir, investigadores de la Universidad de Rhode Island, en Estados Unidos, concluyeron que la combinación auto-celular causa lo que se conoce como "visión de túnel".
Es la constricción del campo visual que se traduce en la disminución de la visión periférica; es cuando una persona parece estar viendo determinado objeto y todo lo que lo rodea, pero su cerebro no está procesando una gran parte de lo que está viendo.
Igual que manejar ebrio
¿Conducir con un celular presionado a la oreja es como manejar bajo los efectos del alcohol?
De acuerdo con un estudio que realizaron psicólogos de la Universidad de Utah, la respuesta es afirmativa.
Ambos factores afectan la concentración y el tiempo de reacción frente a otros vehículos.
"Así como alguien arriesga su vida y la de otras personas al conducir ebrio, pone en peligro la propia vida y la de otros conductores cuando maneja hablando por celular", afirma David Strayer, profesor de Psicología y autor principal del estudio El nivel de distracción es muy similar.
Los investigadores demostraron que estas personas manejaban más lentamente.
Asimismo, tardaban considerablemente en frenar y tenían más probabilidades de chocar.
En efecto, los participantes que chocaron contra el auto de seguimiento estaban conversando por teléfono. Ninguno de los que estaban ebrios lo hicieron.
"No quiere decir que la gente debería comenzar a conducir con unos tragos de más", señaló Frank Drews, uno de los autores del estudio.
"Significa que hablar por celular al manejar es tan peligroso o quizás más que conducir ebrio, lo que es completamente inaceptable".
Consejos
Quienes están empezando a manejar (adolescentes) tienen probabilidades de sufrir un accidente de tránsito si usan el teléfono celular mientras conducen. Los jóvenes que ya saben manejar deben prestar atención a los consejos sobre los peligros de conducir y hablar por el celular o enviar mensajes de texto tiempo. Si en plena vía y recibe una llamada importante, lo más sensato es que busque dónde aparcar para devolver la llamada.
Servio Viloria
Fuente:www.sciencedaily.com
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