La periodista española Mey Zamora propone un mapa de ruta para los solteros, para los que vuelven a serlo, para los que se independizan o para los que estrenan casa. Son consejos sencillos que van, desde cómo mantener un hogar impoluto, hasta la elaboración de platos sencillos o consejos útiles para ahorrar tiempo y dinero.
Mey Zamora tuvo que optar entre su profesión y el cuidado de su familia cuando los niños hicieron su aparición. Madre de cuatro hijos, se decantó por el hogar como principal opción de vida, pero aprovechó su experiencia para dar consejos literarios profesionales sobre esta materia, fruto de la cual alumbró: "¡Socorro! Me independizo".
Casada también con un periodista, Mey perfila este libro como un manual de consulta de su experiencia doméstica porque "la casa es una empresa en la que cada uno tiene su trabajo y en la que, viviendo el orden, amueblamos la cabeza de nuestros hijos", asegura.
Para esta profesional del periodismo, el mejor regalo que podemos dar a nuestros vástagos es que aprendan a arreglarse por sí mismos cuando se independicen y que sean conscientes de que, tras la alegría inicial, "tendrán más responsabilidades y trabajarán más".
DE UNA CASA A UN HOGAR
Para conseguirlo, la experta enfatiza: "nuestra casa no es un museo, sino un espacio donde vives, por lo que los objetos se deben usar y cuidar ya que, cuanto más los cuidas, más te duran".
Ciertamente, este cuidado permite que se conserven en mejor estado para utilizarlos". Zamora añade que "en la casa tienes que invertir tiempo, trabajo y muchas ganas".
Del mismo modo, para Mey los muebles forman parte importante de nuestra vida y hay que escogerlos según nuestros gustos y necesidades. "Esto teniendo en cuenta que nos faciliten la existencia, ya que un hogar es nuestro punto de referencia, desde donde partes cada día y hacia donde regresas para refugiarte".
Este libro, a juicio de la autora, no es un intento por promover la independencia, sino que está enfocado más bien en una forma de ayudar a los más jóvenes en su futura emancipación, "como un modelo a seguir". Mey ha utilizado testimonios muy cercanos y de primera mano de un universo de jóvenes "independizados" para saber cuáles fueron sus problemas iniciales.
Con una gestación de nueve meses para el momento de la entrevista concedida a Efe, y como si de su quinto hijo se tratara, Mey reivindica el papel voluntario de ama de casa, sin ser por eso excluida de la sociedad. Pone especial énfasis en la idea de que "una casa se convierte en hogar cuando ya hay vivencias y yo ayudo a montar una casa para construir un hogar con mimo y cuidados".
"Intento poder ayudar a las personas no familiarizadas con esta problemática, desde buscar un casa, hasta aconsejar sobre la letra pequeña de los contratos o sugerir trucos, porque las tareas domésticas no tienen que ser un castigo ni una penalización", argumenta Mey.
Aborda un aspecto que quizás se asume con cierta indiferencia por ser algo "de la vida diaria". Son embargo, los consejos en la materia nunca están de más.
Nana de Juan/Efe Reportajes
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