La opinión de los pequeños cuenta a la hora de decorar ese lugar especial para ellos, pues es donde duermen, juegan, hacen sus tareas. La idea es dedicar un momento juntos para mostrarles los distintos tonos de pintura que se pueden emplear. También hay que hablar de la ubicación del mobiliario para saber dónde quedaría mejor la cama, la mesita de las tareas, el cajón de los juguetes. El closet, que no se puede mover, se puede organizar de forma distinta cada cierto tiempo para darle una nueva orientación a las cosas.Iniciando con la pintura, la lista de colores puede orientarse hacia los tonos pastel, para luego combinar con uno fuerte. Por ejemplo, tres paredes en tono rosado o azul pastel y la restante en fucsia o rosado fuerte, azul rey, morado. Los murales son una opción, bien sea comprados e instalados en la pared o diseñados directamente en ella con dibujos de la preferencia de los niños, como delfines, mariposas, carros, flores, gatitos.
Los murales comprados ofrecen la facilidad de que se pueden mover y limpiar fácilmente. Los que se realizan en casa resultan divertidos para los pequeños, ya que pueden participar en el diseño a su gusto.
Estantes. Se recomienda que no sean demasiado altos para evitar que se lesionen si se cae algún libro, juguete u otro objeto. Los módulos integrados son apropiados para recoger lo más posible.
Usualmente tienen compartimientos para ropa, libros, juguetes, calzado. La madera es el material más utilizado para estos muebles, aunque el plástico y el acero inoxidable, así como algunas resinas también son comunes en el mercado.
Al diseñar el mobiliario o escoger las piezas que desea renovar tenga presente que los niños necesitan suficiente espacio para desplazarse en su habitación en su rutina diaria, para bailar, saltar y, en general, para moverse sin limitaciones.
Tranquilidad. Para mantener la paz en el ambiente y permitirles un sueño tranquilo, se recomienda no colocar el televisor o la computadora dentro de la habitación. Estos equipos emiten radiación que puede ser perjudicial para los ocupantes. Por otro lado, es importante que los niños tengan un horario específico para ver la televisión y trabajar o cumplir con sus tareas en la computadora de manera que no se perturbe el entorno de su habitación.
Los accesorios, como cuadros para decorar las paredes, tapetes, lámparas, puede seleccionarlos en tonos que vayan de acuerdo con el que predomine en el espacio. Las lámparas, en particular, pueden tener formas divertidas, como muñecos para los más pequeños o de balón de fútbol para los más grandes. Todo depende de la creatividad que se aplique.
Ideas que aplicanCuando son pequeños, la habitación puede estar pintada completamente en un color, dejando una libre para plasmar allí un fondo azul y sobre éste muchas estrellas y cometas en blanco. Esto llamará la atención del niño y le brindará un espacio diferente.
Si la habitación es solo para niñas puede optar por tonos rosado, fucsia y blanco en las paredes, el mobiliario y hasta la lencería. Para decorar, puede adquirir algunas flores acrílicas, lámparas con formas llamativas, portarretratos con marcos plateados donde pueda colocar las fotos con sus amiguitas de la escuela.
Las cajas transparentes o las de tela con remaches a los lados son muy útiles para recoger objetos decorativos o utilitarios para dejar espacio para otras actividades, como juegos de mesa, manualidades con pintura o pegamento.
Un estilo sencillo con líneas bien definidas. Convertir la casa en un santuario es posible a través de la decoración estilo zen.
Se trata de transformar los espacios en áreas acogedoras, con poco mobiliario y seleccionando el más apropiado para evitar las distracciones. Esto busca brindar armonía, tranquilidad, sosiego. Evitar todo lo superfluo para aprovechar cada metro cuadrado al máximo.
Con la iluminación adecuada y la utilización de tonos de pintura preferiblemente claros, se puede conseguir que la claridad y simplicidad potencien la capacidad receptiva de la mente humana.
La filosofía zen apunta hacia la "sintonía con la vida misma". Para ello es necesaria la relajación física y mental, que permita alcanzar la apertura mental y ver el mundo con una nueva perspectiva. En este sentido es vital tener un ambiente cónsono con esta búsqueda en el hogar. Hay que lograr la armonía entre diversos elementos como la luz, colores, texturas, estructuras.
Volver a los orígenes. Por ejemplo, es importante concentrarse en los elementos elaborados con materiales naturales como la madera. Si es "rústica", aun mejor, porque puede recrear la vista y relajarse siguiendo las vetas de la madera en cada parte de la decoración. Dando continuidad a la naturaleza en la vida del hombre, los colores son tomados de la misma Tierra: el azul del cielo y el mar; el verde y el marrón de los bosques, parques, selvas; el naranja y rojo de las hojas de las plantas en otoño o de las flores.
La iluminación tiene un efecto determinante en el estado de ánimo de las personas, bien sea que provenga de una lámpara, unas velas o que sea la luz natural del sol que cada día proporciona calidez y llena de energía.
Se recomienda, en la medida de lo posible, dar paso en el hogar a la luz natural. Esto se puede lograr eliminando -total o parcialmente- los tabiques o divisiones innecesarios. En estos casos el cristal puede ser un fuerte aliado. Puede asesorarse en los establecimientos especializados para colocar en vez de una pared de bloques, una de vidrio, que permita el paso de la luz, que la potencie y, además, de la oportunidad de apreciar el entorno.
Por Marilin Pino A. El Universal
