Los amantes de las motocicletas siguen la aventura, sobre todo fuera de la ciudad, donde las utilizan básicamente como medio de transporte al trabajo.Al tener una motocicleta las personas se pueden desplazar más rápido, aspecto muy conveniente en el tráfico de las grandes urbes.
Con respecto a la conducción, aplican medidas de seguridad similares a las recomendadas para todo conductor.
Llegar a salvo
La pasión quizás llegue a deslumbrar a quien se encuentra al volante de una moto, nublar su sentido común. Para evitar accidentes, lo indicado es adquirir experiencia en el manejo de este tipo de vehículos, desarrollar habilidades en la carretera, además de respetar las leyes de tránsito y aplicar la sensatez en todo momento.
Solo la práctica permite conocer bien los mecanismos de la moto y, a futuro, determinar si hay un desperfecto.
Por otro lado, permite que el cuerpo se habitúe a una posición adecuada sobre el asiento, con equilibrio y destreza.
En dos ruedas, adultos y jóvenes alcanzan el máximo de la adrenalina
Si es una persona que se cansa con facilidad, tome previsiones. Realice varias paradas para reposar, estirar el cuerpo, tomar aire, caminar un poco, comer algo, hidratarse. Aproveche para revisar la moto, llenar el tanque de gasolina si es necesario, cerciorarse de que todo está en orden.
Por más experiencia que tenga, nunca será el mismo. Encontrará rutas irregulares, sectores con humedad y densa neblina. La longitud de las rectas, las curvas y el ancho de la vía serán distintos en cada ruta por donde transite. Por lo tanto, no asuma que conoce "la carretera" porque tiene varios años conduciendo una moto.
Los más experimentados "moteros" recomiendan anticiparse a los cambios del clima -aunque no se pretenda ser un experto-, lo cual permitirá ganar tiempo o, simplemente, evitar contratiempos en la vía.
Antes de partir
Al igual que con un automóvil, es pertinente realizar el chequeo de los sistemas de la motocicleta periódicamente. Tanto más si pretende viajar en ella largos trechos hacia destinos remotos.
Revise los cauchos para garantizar que tienen la presión adecuada. Asimismo, el sistema de luces, que le servirán de apoyo al caer la tarde, durante la noche y a tempranas horas de la mañana.
Los frenos son vitales para salvaguardar su vida en la carretera y deben estar en perfecto estado.
Si no conoce cómo hacer la revisión y ajuste de los mismos, acuda al taller mecánico para un servicio apropiado.
El tanque de gasolina debe estar lleno y es pertinente revisar el nivel después de cierto kilometraje en su recorrido.
Pude hacerlo en las paradas programadas para descansar.
Limpie bien la carrocería con productos profesionales que puede encontrar en las estaciones de servicio, autoperiquitos, entre otros. Mantenga los espejos libres de empañaduras, pues son "ojos" adicionales durante el desplazamiento
marilin pino a.
el universal
mpino@eluniversal.com
